El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha concedido al Cabildo de Fuerteventura una ayuda de 44.380 euros para el desarrollo del programa de reintroducción de la tortuga boba (Caretta caretta) que la Corporación insular lleva a cabo.

La Consejería de Medio Ambiente solicitó esta ayuda con el objetivo de financiar parte del conjunto de actuaciones correspondientes al ejercicio de 2016, explica el Cabildo de Fuerteventura.

En el marco de este programa de conservación, 60 nidos fueron trasladados de Cabo Verde a las playas de Canarias entre 2006 y 2011, en una primera fase del proyecto, de los que nacieron 2.300 crías que fueron criadas en cautividad.

En este periodo, se liberaron un total de 1.200 que, debido al carácter de la especie, se estima que, a partir de este año puedan regresar a las playas de Canarias como adultos para depositar sus huevos.

Con este objetivo, la Consejería de Medio Ambiente impartirá charlas divulgativas dirigidas a turistas, escuelas de surf o actividades deportivas y de ocio que se desarrollen en las playas, habitantes de la zona y población en general.

Además, dentro de esta campaña, se repartirá material divulgativo, se instalarán señales informativas en las playas y se difundirá información a través de medios de comunicación y redes sociales.

El Cabildo ha informado de que la metodología de trabajo a desarrollar en esta anualidad dentro del programa de reintroducción de la tortuga boba se basa, además, en el seguimiento de los ejemplares criados en cautividad en la guardería de tortugas de Morro Jable.

La Consejería de Medio Ambiente adecúa las instalaciones al tamaño y necesidades de los ejemplares criados en cautividad, con la consiguiente reparación y mantenimiento de tanques, adecuación de tuberías y acceso a los depósitos para la limpieza.

Asimismo, se procederá a la instalación de cámara de fotos y vídeo GoPro, para el estudio del comportamiento de las tortugas del centro y el seguimiento biométrico y físico por parte de un especialista veterinario.

Por otra parte, se liberarán tres tortugas nacidas en Canarias, a las que se les instalará un radiotransmisor con el objetivo de conocer su comportamiento y ruta en el mar.

Esta ayuda económica se destinará además al mantenimiento de una alimentación variada, compuesta por alimento natural (pescado e invertebrados), o por pienso.